La entidad se adentra en la revolución de la lA
La inteligencia artificial (IA) ha revolucionado la forma en que trabajan las organizaciones en todo el mundo. Desde el análisis de datos, la generación de contenidos, la automatización de tareas y la optimización de procesos, hasta la toma de decisiones estratégicas, la IA se ha convertido en una herramienta crucial para alcanzar el éxito en entornos cada vez más cambiantes y complejos. Consciente de esta realidad, el Instituto SAMU de Investigaciones Científicas (ISIC), a través de Academia SAMU, ha organizado un curso de introducción a la IA dirigido a altos directivos de la entidad, con el objetivo de proporcionarles los conocimientos necesarios para incorporar esta tecnología en su trabajo. El curso ha sido impartido por el equipo de OGA Data Driven Solutions, colaborador clave en la transformación digital de SAMU.
La inteligencia artificial (IA) hunde sus raíces en la historia a mediados del siglo XX con el avance de la computación y las matemáticas, pero no fue hasta la llegada del aprendizaje profundo (deep learning) en la década de 2010 cuando inicia su historia moderna. El lanzamiento en 2022 de ChatGPT, un programa informático entrenado para reconocer y mantener conversaciones con impresionantes capacidades y autonomía, se convirtió en un hito para esta tecnología, cuyo nivel y velocidad de desarrollo, de la mano de algoritmos de deep learning cada vez más poderosos y complejos, está marcando un punto de inflexión en la historia de la humanidad.
La inteligencia artificial tiene como combustible el dato y es transformadora por su capacidad de procesarlo a una escala jamás experimentada, y cada vez mayor. Esta capacidad de gestión de datos ha permitido la creación de modelos sofisticados capaces de realizar tareas que antes se consideraban exclusivas de los humanos, y que están revolucionando ámbitos como la investigación, la salud, la educación o la gestión empresarial.
En este contexto, las organizaciones que están logrando almacenar, analizar y ordenar adecuadamente los datos que genera su actividad están consiguiendo ventajas competitivas de enorme impacto. Es la cultura del Data-driven, la toma de decisiones basadas en el análisis y la interpretación de los datos que describen, de forma objetiva, una realidad de negocio.
SAMU, inmersa en un proceso de transformación digital, trabaja en la implementación de herramientas basadas en IA dentro del proyecto SAMU Orión.
Desde la automatización de procesos administrativos hasta la optimización de la gestión del talento y los recursos asistenciales, SAMU ha comenzado a aplicar la IA en diversas áreas clave.
El proyecto LLM es uno de los principales ejemplos de esta aplicación. Esta herramienta de procesamiento de lenguaje natural (NLP) está diseñada para facilitar las consultas de información sobre la organización y optimizar el tiempo y la precisión en la revisión de documentos. Por situarla en un ámbito familiar para los usuarios, su utilidad es similar a la de ChatGPT, pero centrada en contenidos documentales de la organización.
Esta aplicación permite a los usuarios realizar consultas en lenguaje natural sobre cualquier documento o grupo de documentos relevantes. A través de preguntas directas, el sistema proporciona información de manera precisa y rápida, integrando una amplia gama de documentos internos y externos relevantes para SAMU y sus colaboradores. De este modo, gracias a esta herramienta los departamentos pueden contrastar decisiones y optimizar sus actuaciones con base en datos detallados y accesibles.
Otro ejemplo de aplicación de IA en la transformación digital de SAMU es el proyecto de Optimización de Calendarios, desarrollado junto al equipo de OGA. Este sistema automatiza y optimiza la planificación de turnos y cargas laborales, y gestiona las incidencias de última hora para permitir una replanificación rápida y eficaz.
Estos avances reflejan el compromiso de SAMU con la innovación tecnológica. Aunque el camino de la IA apenas ha comenzado, la entidad se prepara para utilizar esta tecnología no solo como un recurso de optimización de la gestión, sino como una palanca de mejora en la atención sanitaria y social y, en última instancia, del cuidado de los colectivos y personas vulnerables con los trabaja la organización.
ResponderReenviar |