Jara Díaz Vázquez: “Todos los días deberían ser 8M”

La trayectoria profesional de la socióloga Jara Díaz Vázquez (Fuentes de Andalucía, Sevilla, 1989) siempre ha estado vinculada a colectivos vulnerables. Llegó a SAMU por primera vez en 2018 y regresó en 2023 como técnico de proyectos del área de la Mujer de SAMU.

—Su trayectoria profesional en SAMU tiene dos etapas: la primera en 2018 y la segunda cuando decidió regresar en 2023. ¿Por qué decidió marcharse la primera vez?
—Llegué a SAMU por primera vez en 2018 tras finalizar el proyecto Espacios Comunes del Ayuntamiento de Sevilla, el cual coordinaba. Trabajé en el departamento de Desarrollo pero, en aquel momento, sentía que me faltaba práctica y, aunque disfrutaba con los proyectos, tenía la necesidad de estar en el terreno, de ponerle rostro a las personas a las que se dirigían los proyectos que redactaba. Así fue como llegué a la intervención social. Me alegra mucho poder contar con esa experiencia, pues me ha permitido crecer tanto a nivel personal como laboral. Creo que es muy necesaria la experiencia en el terreno cuando te dedicas a elaborar proyectos, pues aprendes que detrás de los datos siempre hay rostros de personas.

—¿Por qué decidió volver a SAMU?
—Fue a principios de 2023. Llevaba cinco años trabajando como técnica de acogida en la CEAR (Comisión Española de Ayuda al Refugiado) y, en aquel momento me encontraba en un punto de inflexión en mi vida, que coincidió con la maternidad, algo que todos sabemos que te cambia la vida. Trabajar en la CEAR, aparte de una implicación mental, requiere una implicación humana y un gran compromiso que, en ese momento, con mi hija tan pequeña y las pocas horas de sueño de las que disfrutaba, me suponían un desafío más que una satisfacción. Tras cinco años en la CEAR empecé a plantearme la vuelta a los proyectos. Sentía que necesitaba un cambio en la metodología de trabajo, un trabajo más de pensar, redactar, reflexionar. Fue entonces cuando me enteré de que había una vacante en SAMU como técnica de proyectos. Además, aquí me reencontré con Conchi Pérez como directora del área de Intervención Socioeducativa y de la Mujer. Ya había coincidido con ella en SAMU, lo cual me dio mucha alegría. De hecho, quiero aprovechar para agradecerle a Conchi la confianza que depositó en mí y la oportunidad que me dio. También por su apoyo y confianza en el día a día, pues así lo complejo se hace más simple.

—¿Cómo ha evolucionado el área de la Mujer desde su puesta en marcha hace relativamente poco tiempo?
— Cuando regresé a SAMU, este área estaba ya funcionando. Tenían varios proyectos pendientes de ejecutar, que eran en su totalidad proyectos nacionales. La principal evolución que ha experimentado esta área ha sido que el foco de atención se ha puesto en la intervención social, en lograr servicios propios dirigidos a mujeres en situación de vulnerabilidad (migrantes, embarazadas sin recursos, etcétera). También, en los últimos meses se está trabajando en la presentación de proyectos a convocatorias con fondos europeos. Es complicado comenzar desde cero en la gestión de servicios de intervención social con mujeres, pero creo que vamos por el buen camino. Actualmente hemos presentado diferentes proyectos y estamos a la espera de resoluciones. Algunos de estos proyectos son Resurge Mujer, Programa Nido o Vínculos.

—¿Cuáles han sido las principales dificultades que os habéis encontrado en este camino?
—La solvencia. Hay que tener en cuenta que es un área de reciente creación. A veces también nos hemos quedado fuera de algunas convocatorias porque en los estatutos no aparecía específicamente algún ámbito de actuación.

—¿Cuál es el gran reto del área de la Mujer de SAMU?
—Nuestro gran reto es contar con servicios propios de intervención social dirigidos a mujeres. Estos servicios abarcan diversos ámbitos, desde la inserción sociolaboral hasta la atención integral a mujeres víctimas de violencia de género o trata de personas, así como programas orientados a promover una parentalidad positiva.

—¿Qué aspectos de la organización cree que deberían cambiar o mejorar para conseguir este gran reto?
—Desde aquí pido que sigan apostando por el área de la Mujer, que confíen en nosotras. Es complicado arrancar, los inicios suelen ser así, pero lo conseguiremos. Hemos desarrollado proyectos que han tenido muy buena acogida por parte de diferentes organizaciones y donantes, solo nos falta un poco de tiempo.

—Coincidiendo con el mes de marzo, me gustaría preguntarle por qué es para usted importante el 8M.
—Para no olvidar. Es una fecha en la que pienso en todas las mujeres, pero principalmente en las oprimidas, en las que viven en situación de más precariedad, en las que se ven obligadas a migrar. Pienso en las mujeres de la fresa de Huelva, en las mujeres sin hogar, en las que no pueden conciliar. En las mujeres palestinas. Todos los días deberían ser 8M, pero, al menos, cuando aparece en el calendario sabes que es un día en el que la lucha colectiva se extiende a todas. La rabia y el coraje se transforman en unión y recordamos que, aunque estemos cambiando el mundo, aún nos queda mucho camino por recorrer juntas. Para mí este día viene cargado de emociones. Es un día de salir a la calle, de estar juntas, de compartir. Me siento muy cómoda en los espacios que se forman en torno al 8M, no importa que no conozca a nadie. Cualquier mujer en estos espacios puede decir que se siente arropada. Y libre.

—¿Hizo huelga el pasado 8 de marzo?
—Sí, al igual que en años anteriores. Mi razón para hacerla este día es la movilización a nivel mundial, la visibilización que se le da ese día al trabajo de las mujeres. ¿Qué pasaría si un solo día, sólo uno, paramos todas? No sólo en el ámbito laboral, sino en otros espacios y trabajos, como los cuidados, el consumo. Pero no todas podemos permitirnos parar ese día o no a todas se nos permite hacerlo. Por otro lado, respeto la decisión de aquellas mujeres que deciden no hacer huelga. Lo respeto y lo entiendo. Y las apoyo. Por eso tenemos que seguir saliendo a la calle, por las que no pueden. Y por las que no están porque el machismo les quitó la vida. También por las que vendrán.

—¿Cómo se ha celebrado en SAMU el 8M?
—Hemos querido desarrollar una acción interna en la que pudiéramos involucrar a cualquier persona de la plantilla, incluso en la distancia. Por esta razón, hemos elaborado un mural colectivo bajo el lema ¿Qué es para ti el feminismo? La idea era crear un espacio abierto en el que cada persona pudiese expresar sus ideas y sentimientos sobre el feminismo a través de cualquier forma de arte, y que esto pudiese llevar a la reflexión colectiva sobre el feminismo en nuestras vidas. El mural estaba ubicado en la sede central de SAMU, en la isla de la Cartuja, en Sevilla.

—¿Cómo han respondido los trabajadores a esta actividad?
—La participación ha sido elevada. En el mural se han plasmado frases, collages, fotografías, canciones, incluso una camiseta… Nos han llegado aportaciones de trabajadores que no se encuentran físicamente en la isla de la Cartuja, como por ejemplo murales elaborados por las personas usuarias de otros centros. Son maravillosos y me gustaría aprovechar para darles las gracias. Este mural lo digitalizaremos para poder utilizarlo en cartelería, como portadas de proyectos, trípticos…

—Y para usted, ¿qué es el feminismo?
—Hace tiempo que pienso en el feminismo del día a día, el feminismo de la cotidianeidad. Para mí el feminismo es mi abuela vendiendo huevos para que mi madre y mi tío pudiesen ir al colegio; es mi madre dando clases de Sevillanas para pagarse la carrera de Magisterio; o las abuelas que cuidaban a sus nietas y a su vez asistían al programa de Empleo que desarrollamos en Ceuta. Al hablar de feminismo se me vienen a la mente nuestras ancestras, y el día a día de esas personas que no han sido consideradas referentes y que han luchado tanto por lo que somos ahora. También es feminismo una entidad como SAMU que apuesta por proyectos enfocados en la mejora de la calidad de vida de las mujeres, o donde más de la mitad de los cargos directivos los ocupan mujeres. Allí donde se luche por la igualdad de derechos, ahí hay feminismo. Desde el derecho a la educación a los derechos sexuales y reproductivos, la libertad de circulación o a caminar por la calle sin miedo.

Fundación SAMU promueve la lectura fácil

A largo de la historia, el ser humano ha ido creando diversos códigos de comunicación. Según Óscar García Muñoz en su libro Lectura fácil: métodos de redacción y evaluación, hace 8.000 mil años el ser humano desarrolló un código a través del cual eran viables los mensajes escritos en piedra, que eran descifrados gracias a la capacidad del ser humano para la lectura, que a su vez dispone de tres competencias claves: la lingüística, la cognoscitiva y la comunicativa.

Siguiendo la línea de este autor, el proceso de lectura comprensiva es una actividad compleja que implica percepción a través de los ojos y memoria icónica para retener la información más importante en unión a un proceso léxico, sintáctico y semántico, que nos permite obtener el significado del texto leído y adquirir ciertos conocimientos.

La lectura fácil nació en Suecia hace 50 años y llegó a España en 2002 con la Asociación de Lectura Fácil en Barcelona.

El concepto de lectura fácil ha tenido una evolución a lo largo de la historia. Según recoge García Muñoz (2012), existen distintas definiciones de lectura fácil. Por un lado, la International Federation of Library Associations and Institutions en 1997, dice que la lectura fácil consiste en la adaptación lingüística de un texto con el fin de hacerlo más fácil de leer, pero no más fácil de comprender. Por otro lado, el Grupo Educación y Diversidad (EDI) nos lanza otra definición más general: “Es un planteamiento general sobre la accesibilidad a la información y a la comprensión de los mensajes escritos de las personas con diversidades intelectuales y de aprendizaje”.

Lenguaje sencillo y claro

Actualmente nos apoyamos en conceptos más completos, como el dado en 2022 por Discapnet, que llama lectura fácil a “aquellos contenidos resumidos y realizados con lenguaje sencillo y claro, de forma que puedan ser entendidos por personas con discapacidad cognitiva o discapacidad intelectual, personas con baja formación cultural o problemas de tipo social”.

Y según la Fundación Adecco, podemos hablar de lectura fácil como “un método de redacción o adaptación que permite una lectura y comprensión más sencilla de un contenido”. Es una herramienta fundamental en la búsqueda de la accesibilidad universal, ya que permite que todas las personas, independientemente de su nivel de educación o capacidad cognitiva, puedan acceder a la información de forma clara y comprensible, y la entienda.

En definitiva, con el Programa de Accesibilidad Universal pretendemos hacer posible una lectura adaptada a cada persona usuaria de los centros de Fundación SAMU en el que lo llevamos a cabo, como son la Residencia Santa Ana (Sevilla), la Residencia San Sebastián (Cantillana, Sevilla) y la Unidad de Día San Lucas (Sevilla).

Además, queremos hacer este programa extensivo a las familias de nuestros usuarios con el fin de buscar un beneficio mayor y fomentar en todo momento el cumplimiento de la Declaración Universal de los Derechos Humanos en lo que respecta a los derechos al acceso a la información y la comunicación (artículo 5) y a estar plenamente informados de todo lo que forma parte de sus vidas (artículo 27.5).

Fases del programa

El Programa de Accesibilidad Universal tiene como objetivo que cada persona que reside en los recursos de Fundación SAMU y sus familias accedan a la información, comprendan y tomen parte de su propio proceso vital conociendo sus derechos y deberes.

Para implantarlo, este programa se organiza en distintas fases. En una primera fase, se visita cada centro y se identifican y seleccionan aquellos documentos que deben ser adaptados a lectura fácil. Estos documentos son los contratos de ingreso, el reglamento de régimen interno y los menús, entre otros.

En una segunda fase, se procede a realizar los cambios en estos documentos, usando un lenguaje más simple, imágenes o pictogramas y eliminando palabras técnicas, frases extensas o abreviaturas, por ejemplo. Para ello, el técnico responsable cuenta con un plazo de 10 meses.

Tras el trabajo de adaptación de cada documento y de una parte de la cartelería de cada centro (pictogramas que señalen cada sala, despachos, talleres, menús…), se lleva a cabo una última fase de validación con reuniones con profesionales (dinamizadores) y validadores (personas usuarias) para comprobar si, una vez leídos los documentos adaptados, los usuarios captan la información y la entienden.

Para finalizar, queremos resaltar que todos los profesionales de Fundación SAMU buscan vías de acceso adaptadas a las necesidades de cada persona usuaria.

Contamos con profesionales formados en la materia que acompañan a cada persona usuaria en este proceso de inclusión social a través de este Programa de Accesibilidad Universal para todos.

Mediante una lectura fácil construimos una sociedad más solidaria, comprensiva y abierta a una plena inclusión para cualquier persona con algún tipo de dificultad en comprensión lectora.

Hay que tener en cuenta que de la lectura fácil no sólo se benefician las personas con algún tipo de diversidad funcional, sino toda persona que necesite algún tipo de apoyo para acceder a la información que debe o desea conocer como sus familiares o su entorno más cercano.

De esta forma, aumentarán las relaciones sociales y la autosatisfacción personal, adquiriendo autonomía en todo lo que respecta a sus vidas y actividades del día a día.

 

ROCÍO GARCÍA GÓMEZ Y ELENA DUQUE RECIO.

Área de Dependencia e Inclusión Social de Fundación SAMU

Punto perfecto para el arroz de ISL Valencina

Este año las menores y los profesionales del ISL Valencina nos hemos aventurado a hacer algo completamente desconocido: participar en el XV Concurso de Paellas organizado por el Ayuntamiento de Gines (Sevilla). Desde el primer momento nos llamó la atención esta actividad, por lo que decidimos apuntar a las menores al concurso. La actividad suponía un gran reto tanto para educadores como para los menores del centro, pues no contábamos con una experiencia culinaria previa.

Sin pensar más en las barreras que pudieran suponer presentarse a dicho concurso, nos armamos de valor y el día 13 de enero a las 10:30 de la mañana, con todos nuestros preparativos e ingredientes, nos presentamos en el Parque Concejala Dolores Camino, en Gines, donde se iba a desarrollar el concurso. Es cierto que cometimos algunos fallos de principiantes, como que se nos olvidó llevar la paellera, cuchillos y una bombona que tuviera gas suficiente, pero bueno, esos son detalles que aclararemos a continuación.

Una vez situadas en el stand y llenas de incertidumbre, pudimos notar como el ambiente era tierno, amigable y cercano. La competitividad no era algo que primara puesto que nuestros vecinos paelleros se volcaron con nosotras en todo y pasamos una mañana de elaboración muy entretenida entre risas y carcajadas.

Esta experiencia permitió a las menores disfrutar de la convivencia vecinal, la cual es una excelente oportunidad para ampliar la red de contactos y entablar relaciones sociales con el entorno.

La actividad supuso la puesta en marcha de competencias como el trabajo en equipo, el liderazgo, la empatía, la comunicación y la confianza. Supimos solventar los contratiempos sobrevenidos y, a pesar de ellos, nunca perdimos el espíritu de participación en el concurso. Vivimos situaciones un poco estresantes, como el hecho de tener que ir corriendo en busca de una bombona en mitad del concurso puesto que nos quedamos sin gas. Sin embargo, este contratiempo nos hizo confiar en nuestra capacidad de resiliencia.

Tras un parón musical protagonizado por una banda rockera, llegó el momento de la entrega de premios. Nuestras esperanzas de ganar algo no eran elevadas, pero estábamos muy felices por el resultado exquisito y la gran cantidad de público que quería degustar nuestra paella. Tras 15 minutos de entrega de premios a todas las categorías existentes que pueda tener una paella, la concejala del Ayuntamiento de Gines que entregaba los premios giró su cabeza y mirándonos fijamente mencionó: “El segundo premio a la mejor paella es para… ¡las chicas de Valencina!”.

En esos momentos, todas saltamos de júbilo y nos dimos un abrazo. Acto seguido subimos al escenario y todos nos recibieron con gozo y alegría. Las chicas estaban muy contentas y, en ese momento, pensamos que todo el esfuerzo había mereció la pena. Habíamos hecho historia.

Anna: “Quiero ahorrar más dinero para comprarme mi propio equipo para jugar al hockey”

—¿Qué significa para ti haber participado en este concurso?
—Fue muy divertido, había muchísima gente en un espacio muy grande. También había muchas personas que querían participar y hacer su propia paella. Fue toda una fiesta.

—Teníais mucha competencia.
—Sí, no nos lo creíamos, cuando llegamos y vimos el ambiente que se respiraba nos quedamos muy sorprendidas.

—¿Habías cocinado antes una paella?
—No, nunca había cocinado antes, pero mis compañeras Amira y Houda sí que tenían más experiencia. Ellas me decían cómo tenía que cortar las verduritas y el resto de los ingredientes, dónde tenía que echar las cosas cortadas, cómo había que hacerlo en la sartén… Yo hacía de pinche. Al final nos salió muy buena.

—¿Cómo fue el momento del anuncio del premio?
—Fue una sorpresa. Ninguna nos lo esperábamos. Estábamos muy felices, nos pusimos a celebrarlo y luego nos llamaron para subir al escenario y darnos el premio, un marco de fotos donde ponía 2º Premio a la Mejor Paella y un diploma de agradecimiento por participar en la paella. ¡Ah! Y también nos dieron 100 euros.

—¿Qué vas a hacer con ese dinero?
—Quiero ahorrar más dinero para comprarme cosas para el hockey y así poder ir con mi propio equipo a las clases.

—¿Algo más que quieras añadir?
—Si, que me gustan mucho las actividades que hacemos en el centro porque nos permiten conocer más gente del pueblo.

Ruslana: “Me gusta que en el centro hagamos tantas cosas, espero que siga siendo así”

—¿Cómo has vivido esta experiencia?
—Al principio estaba muy nerviosa porque yo no sabía muy bien cómo cocinar la paella. Era la primera vez que lo hacíamos y no sabíamos si iba a salir bien, pero la educadora estaba con nosotras y nos ayudó en cada paso que teníamos que ir dando.

—¿Qué tipo de paella cocinasteis?
—De marisco y verduras.

—¿Qué te gustaría hacer con tu premio de 100 euros?
—Aún no lo sé. Creo que lo voy a ahorrar.

—¿En qué te gustaría invertir el dinero que ahorres?
—Me gustaría comprar la ropa para el arbitraje o me compraría un piso.

—¿Qué opinas de las actividades que se realizan en el ISL Valencina?
—Me gusta mucho que en el centro nos ayuden y aprendamos tanto. Hacemos muchas cosas y espero que siga siendo así.

Houda: “Aprendí a cocinar paellas y a hablar español en un curso en el que me apuntó el centro”

—¿Habías cocinado antes de participar en este concurso?
—Sí, en el centro nosotras hacemos la comida para la semana con las educadoras y aprendemos a cocinar. Me gusta mucho cocinar.

—¿Dónde has aprendido a preparar una paella?
—En un curso en el que me apunto el equipo del centro. Los fines de semana, a veces, también hacemos paellas en el centro para comer, de pollo, marisco o verduras.

—¿En ese curso aprendiste a cocinar recetas típicas españolas?
—Sí, a cocinar y a hablar español.

—¿Qué tienes pensado hacer con tu parte del premio?
—Dentro de poco cumplo 18, por lo que ese dinero lo utilizaré para algo importante cuando cumpla la mayoría de edad o lo ahorraré.

—¿Quieres añadir algo más?
—Sí, agradecer al centro de Valencina y al Ayuntamiento de Gines la oportunidad que nos han dado de participar en una actividad así.

Fundación SAMU refuerza la atención a menores migrantes en Ceuta

Ante las nuevas llegadas de niños migrantes a Ceuta desde la primera semana de febrero, Fundación SAMU ha puesto en marcha la Operación Ceuta 2024 con el objetivo de reactivar infraestructuras de acogida y reforzar el dispositivo de atención a menores existente en la ciudad autónoma.

El dispositivo tuvo su origen en las jornadas del 9 y 10 de febrero, viernes y sábado, coincidiendo con el paso de la borrasca Karlotta por la ciudad. En un escenario de reducción de la vigilancia costera por parte de las Fuerzas de Seguridad Marroquíes a causa de las condiciones metereológicas adversas, al menos 102 personas migrantes, 40 de ellos menores de edad, entraron irregularmente en la ciudad.

La inmensa mayoría logró acceder a la localidad española norteafricana a nado bordeando el espigón fronterizo del Tarajal, aunque también se registraron intentos de cruce del vallado terrestre.

Cuarenta de los más de cien inmigrantes a los que atendió el Equipo de Respuesta Inmediata ante Emergencias (ERIE) de Inmigración de la Cruz Roja de Ceuta eran menores de edad, que fueron acogidos en el centro La Esperanza, titularidad del Servicio de Protección a la Infancia de la Administración local y gestionado por Fundación SAMU.

Ante la situación de sobreocupación de este centro, Fundación SAMU se puso manos a la obra para reactivar las instalaciones de Triana, un segundo centro de acogida situado en la zona norte de la localidad.

Desde esas primeras horas, más de una veintena de profesionales de la entidad se afanaron en las tareas de logística y reactivación de las infraestructuras del nuevo centro para acoger hasta 40 menores migrantes sin referentes familiares: reforma de los cuartos de baño, zonas comunes y espacios de descanso; revisión de fontanería y electricidad; habilitación de un espacio de recreo; limpieza de los alrededores; instalación de módulos auxiliares y medidas contra incendios, entre otras labores.

En paralelo a estas actuaciones, Fundación SAMU inició un proceso de selección de profesionales para cubrir las necesidades del centro reclutando perfiles de educador social; trabajador social y especialistas en integración sociolaboral, atención psicológica o servicios generales, entre otros.

Tras 15 días de trabajo, ya en la última semana de febrero, el centro Triana ya estaba preparado para recibir la inspección del Área de Menores de la Ciudad Autónoma de Ceuta como paso previo a su puesta en marcha y al traslado de menores alojados en La Esperanza.

Fundación SAMU ha trabajado en la atención y cuidado de menores migrantes sin referentes familiares en Ceuta desde la crisis migratoria de 2021, una de las mayores de la historia reciente de la Ciudad Autónoma. Entre el 17 y el 18 de mayo de ese año, más de 12.000 personas irrumpieron en la ciudad. Al menos 1.500 (aunque pudieron ser muchos más) eran niños y niñas.

SAMU estuvo en primera línea de aquella crisis desde el primer minuto, y llegó a atender a casi un millar de niños en tres recursos: Piniers, El Tarajal y Santa Amelia. Meses después, la fundación pasó a encargarse de La Esperanza, el centro que sigue hoy operativo con más de una veintena de profesionales.

Juana Macías, presidenta del ISIC y directora de la Academia SAMU: “Aquí he conocido a personas con talento y muy valiosas”

Juana Macías Seda (Sevilla, 1959) proviene del mundo universitario y está vinculada a SAMU desde sus orígenes. En febrero de 2021, la dirección general de la entidad le propuso liderar dos nuevos proyectos: el Instituto SAMU de Investigación Científica y la Academia SAMU.

— El Instituto SAMU de Investigación Científica (ISIC) acaba de cumplir tres años. ¿Por qué se decidió poner en marcha?
—SAMU tiene una larga trayectoria en la prestación de servicios sociosanitarios, pero su producción y divulgación científica no está acorde con esta larga trayectoria. Así, el Instituto SAMU de Investigación Científica surgió en 2021 con el fin de potenciar la investigación, promover las tesis doctorales entre los profesionales de SAMU y divulgar, difundir y dar una estructura científica a lo que se viene haciendo en la organización desde hace años. El ISIC intenta da respuesta al interés de tener un corpus científico en SAMU y, con ello, conseguir que SAMU consiga ser Agente del Conocimiento en Andalucía. Esto supondría un aval a la hora de solicitar proyectos científicos. Sin ser Agente del Conocimiento es muy difícil que a SAMU le concedan ningún proyecto de investigación como entidad independiente.

—¿Cuándo empezó SAMU a interesarse por la investigación?
—En realidad, SAMU empezó a investigar sobre temas de emergencias en el año 1981. La primera UVI móvil no era una UVI móvil sanitaria al uso, era una unidad de investigación operativa en emergencias. El jefe, don Carlos Álvarez Leiva, que es una persona visionaria, ya impulsó a principios de los 80 la investigación en temas de emergencias prehospitalaria provocando un cambio de paradigma y de modelos asistenciales que luego han dado lugar a la profesionalización en el sector de las emergencias.

—Además de convertir a SAMU en un Agente del Conocimiento, que es una meta a largo plazo, ¿cuáles son los otros objetivos del ISIC que permitirán lograr esa objetivo final?
—Los objetivos fundacionales del ISIC incluyen impulsar proyectos de investigación en los campos de la salud, bienestar social y educación; aglutinar y coordinar la actividad investigadora y de divulgación científica ya existente en SAMU; y publicar libros científicos y facilitar la publicación de artículos de SAMU en revistas indexadas. Además, contempla como objetivo potenciar la participación de sus miembros en grupos de trabajo relacionados con la investigación y el desarrollo, como por ejemplo el Comité de Innovación, la Cátedra SAMU de Innovación Social.

—¿Cuáles son las acciones que se han proyectado en estos tres años de vida del ISIC?
—Por un lado, está la activación de la Cátedra de Innovación Social de SAMU con la Universidad Pablo de Olavide (UPO), un proyecto de colaboración que tiene tres grandes líneas de trabajo: investigación, divulgación y acción social a través del voluntariado. Por otro lado, contamos con un programa de doctorando llamado Mentoring Doctorando, que tiene como objetivo principal incrementar el número de profesionales de SAMU con tesis doctorales. Consiste en un programa de acompañamiento y asesoramiento a aquellos profesionales de la organización que tienen perfil o interés para hacer su tesis doctoral. En 2022, en la primera edición de este programa de doctorado, unos seis profesionales mostraron interés, pero sólo uno de ellos entró en un programa doctoral en la Universidad Pablo de Olavide. En 2023, fueron 15 los profesionales de SAMU con interés en hacer su tesis. De ellos, nueve profesionales han accedido a un programa doctoral: seis en la UPO, dos en la Universidad de Sevilla (US) y uno en la universidad de Granada (UGR). Como ejemplos tenemos a María Casado, que está realizando su tesis en temas de salud mental y bienestar emocional; Alba Garrido Gata, que profundiza en el sinhogarismo y las soledades no deseadas; Jara Díaz en la temática de migraciones y perspectiva de género; o Roberto Alconada, psicólogo de la clínica de salud mental SAMU Wellness, que realiza sus tesis doctoral sobre el suicidio. Por otro lado, Juan Luque Pelegrin y Laura García Rebolo están trabajando en temas de migración y Almudena Chávez, directora de la Unidad de Estancia Diurna San Lucas, que investiga sobre temas de discapacidad. Cabe señalar que al comienzo del ISIC, SAMU sólo contaba con cuatro doctores y actualmente ya contamos con ocho profesionales con tesis doctorales finalizadas.

—¿Qué otras acciones tiene en marcha el ISIC además de la Cátedra de la UPO y el Mentoring Doctorando?
—Hemos creado una Comisión Ética, pues identificamos que numerosos investigadores solicitaban a SAMU frecuentemente colaboración para acceder a muestras de personas migrantes o personas con discapacidad, principalmente. El carácter expansivo de la organización SAMU con el correspondiente incremento en la plantilla de profesionales, residentes y estudiantes conllevan una intensa actividad asistencial e investigadora. Ello genera un Big Data que resulta ser muy atractivo para un gran número de investigadores e instituciones académicas. Ante esta situación el ISIC activó la Comisión de Ética para dar cumplimiento a la legislación en materia de protección de datos personales. El objetivo es establecer pautas básicas de actuación destinadas a garantizar el derecho al anonimato y confidencialidad de los datos de los diferentes colectivos de profesionales, residentes y estudiantes que integran la organización SAMU. Esta Comisión actúa como un órgano consultivo multidisciplinar y funciona de forma protocolizada con la misión de emitir informes, propuestas y recomendaciones sobre materias relacionadas con las implicaciones éticas de la investigación.

—Tengo entendido que otra de las grandes acciones del ISIC es la Alliance for Migration Research (Alliance 4).
—Sí, su objetivo es facilitar un espacio académico internacional para impulsar las investigaciones relacionadas con las migraciones alrededor del mundo y contrarrestar esa apreciación negativa que existe en torno a la migración. Este proyecto surgió después de que la American University mostrara interés en los datos que manejaba SAMU First Response con el fin de hacer un mapeo sobre la migración en Estados Unidos. Desde el ISIC hemos llamado a otras puertas como la Universidad Loyola o la Universidad de Granada y, tras varios reajustes, el próximo mes de noviembre vamos a celebrar una reunión de expertos en migración. Tenemos profesionales en Fundación SAMU que están llevando a cabo iniciativas muy innovadoras y de gran calado social y a las que no se le está dando luz. A través de este comité o reunión de expertos queremos compartir estas experiencias con otros expertos e investigadores de diferentes instituciones universitarias.

—¿Y dónde entra la Academia SAMU dentro de todo este entramado?
—La Academia SAMU nace en el 2021 vinculada al ISIC aunque con sus propios objetivos. En concreto, se plantea como espacio y agente de educación superior para la plantilla de SAMU. Su objetivo principal es contribuir a la capacitación de los directivos junior y los jóvenes talentos de la organización para que desempeñen un liderazgo que les permita abordar los retos actuales, como la humanización, la sostenibilidad, la innovación, el bienestar emocional, la excelencia en la calidad de los servicios, las finanzas y la digitalización.

—¿Qué diferencia la Academia SAMU del ISIC?
—Mientras que el ISIC se basa en la investigación, la Academia SAMU se centra en la formación. Además del Experto en Desarrollo Directivo que es la formación estrella, la Academia tiene un programa para instruir a los jóvenes talentos directivos dirigido a profesionales cuyos responsables de área o responsables de centro han identificado que tienen capacidad para gestionar pero no han ejercido como tal. Con este fin, organizamos por primera vez en marzo 2023 el curso intensivo de gestión del talento en formato durante tres días en un pueblo remoto de Huelva.

—¿Qué aspectos deben mejorar para que el ISIC y la Academia SAMU continúen avanzando?
—Es necesario mejorar la financiación presupuestaria para llevar a cabo la formación y la investigación y, sobre todo, la difusión y coordinación del talento pedagógico y científico de los profesionales de SAMU.

—¿Por qué decidió ponerse al frente del ISIC y de la Academia SAMU? ¿Qué le motivó a hacerlo?
—Yo procedo del ámbito universitario y, por otro lado, estoy vinculada a SAMU desde los inicios de la organización. Cuando la Dirección General de SAMU me planteó las necesidades existentes, tanto de formación como de investigación, la verdad es que me ilusioné con el proyecto. Me ilusiona poder trasladar mi experiencia como investigadora universitaria y poder contribuir para que en SAMU se vaya consolidando esta capacitación y este corpus científico. Además, tengo el valor añadido de conocer la institución muy bien desde dentro, así como sus necesidades académico-científicas.

—¿Qué le ha aportado el ISIC a nivel personal y profesional?
—Este proyecto me ha enriquecido y ha ampliado mi visión sobre SAMU porque, en los últimos años, he estado bastante desvinculada a la organización. El ISIC me ha permitido conocer la organización más a fondo y su versatilidad, así como colaborar con directores, responsables de áreas y centros que me han aportado vivencias y experiencias motivadoras a nivel personal y profesional. En estos tres años, me he encontrado con personas muy talentosas y tremendamente valiosa que me han mostrado una parte de SAMU poco conocida para mí, y también me han encauzado hacia nuevos proyectos. He conocido a personas muy capacitadas y con una gran experiencia en determinadas materias. En definitiva, he podido conocer a gente con mucho talento dentro de la organización, que incluso ellas mismas no eran conscientes o no tenían la percepción de su conocimiento y valor.

SAMU rinde homenaje al equipo de búsqueda canina que participaron en las misiones humanitarias de Turquía y Marruecos

SAMU ha homenajeado al equipo de búsqueda canina que participó en 2023 en las misiones humanitarias puestas en marcha por la organización tras los terremotos de Turquía y Marruecos.

Este equipo de búsqueda canina está compuesto por Juan Hidalgo, militar en Córdoba; Antonio Miranda, miembro del GREA, y Juan Paisano, actualmente alumno de Escuela SAMU. Los tres coincidieron con Carlos González de Escalada, presidente-director general de SAMU, y Borja González de Escalada, vicepresidente de Fundación SAMU en la misión de Marruecos que SAMU activó tras el terremoto con epicentro en Ighil, en el sur del país, en septiembre de 2023. En este momento, también se encontraba en Marruecos, en concreto en la ciudad de Marrakech, Carlos Álvarez Leiva, fundador de SAMU.

Juan Hidalgo y Antonio Miranda también coincidieron en una misión anterior con Borja González de Escalada. Fue en la de Turquía, en febrero de 2023. Poco después del amanecer del 6 de febrero, cuando ya se contabilizaban por miles los muertos y desaparecidos en Turquía y Siria a causa de dos seísmos de magnitud 7,8 y 7,5 en la escala de Richter, SAMU activó un gabinete de crisis y puso en marcha una misión para enviar a la zona un equipo cinológico de búsqueda formado por tres personas: Juan Gutiérrez, como responsable del dispositivo; Juan Hidalgo, como jefe de rescate; y el guía canino Antonio Miranda. Junto a ellos, un elemento clave en la expedición: Homero, un pastor belga de seis años entrenado para labores de rescate.

En el caso de Marruecos, los voluntarios de SAMU llegaron a la zona de trabajo asignada por las autoridades del país 36 horas después del terremoto. Este inmediato despliegue fue posible gracias a una rápida toma de decisiones, a una gran capacidad de respuesta logística y humana, y al hecho de que SAMU cuenta con presencia en Tánger desde 2017, lo que facilitó las autorizaciones oportunas.

La primera misión estuvo formada por 19 personas: cinco médicos, dos enfermeros, ocho TES y cuatro especialistas en rescate acompañados de dos perros, con Borja González de Escalada, vicepresidente de la Fundación, como mando operativo.

La primera parte de la misión se centró en las tareas de búsqueda de supervivientes a cargo de los perros Homero y Birka. Se encontraron con un hándicap: en una zona de construcciones de adobe y piedra, el terremoto arrasó con la mayor parte de los edificios. Los vecinos y familiares habían logrado sacar a algunas personas de sus viviendas justo después del temblor, pero después ya no fue posible localizar a ninguna persona con vida.

SAMU ha querido agradecer la labor de los tres miembros del equipo de búsqueda canina, así como la de los perros Homero y Birka, así como destacar su compromiso con este tipo de misiones. De este modo, Carlos González de Escalada, presidente-director general de SAMU, y José Antonio Trujillo, director general adjunto de SAMU, le hicieron entrega a todos ellos de una placa conmemorativa, incluido a los dos caninos.

Desde 1998, SAMU acude a zonas de crisis provocadas por desastres naturales o conflictos bélicos en cualquier parte del mundo para brindar atención a la población local. En todos estos años, se ha establecido un camino desde la acción humanitaria hacia la cooperación internacional para el desarrollo, el cual ha sido posible transitar con el apoyo de diferentes aliados públicos y privados: organizaciones de la sociedad civil en el sur, los organismos internacionales y las instancias de la cooperación descentralizada española.

Dependencia: el impacto de las tecnologías

Vivimos inmersos en una revolución digital que está transformando la forma en que interactuamos en casi todos los aspectos de nuestra vida diaria. La incorporación de las nuevas tecnologías en nuestra rutina diaria ha resultado beneficiosa en muchos aspectos. En términos de relaciones sociales, ahora podemos mantener contacto con amigos y familiares en cualquier parte del mundo, compartiendo fotos y videos de manera instantánea. Además, la posibilidad de comprar sin tener que ir físicamente a una tienda beneficia especialmente a quienes tienen limitaciones de tiempo debido a obligaciones laborales o familiares.

Una de las áreas en las que resulta especialmente interesante la implementación de las Tecnologías de la Información y Comunicación (TIC) es en la educación. Durante el proceso de enseñanza, los alumnos requieren de habilidades y capacidades que faciliten su adquisición de conocimientos en tareas diversas. En este sentido, el uso de la tecnología en la educación puede favorecer estas acciones. Asimismo, el acceso a internet y programas multimedia adaptados a personas con discapacidad intelectual permite establecer actividades interactivas de mayor relevancia para ellos.

En la región de Castilla-La Mancha, la Junta de Comunidades, a través del Plan de Autonomía Digital, ha destinado dispositivos digitales a centros de atención a personas mayores dependientes, menores y personas con discapacidad. Esto incluye pizarras y paneles digitales interactivos, ordenadores portátiles, tabletas, gafas de realidad virtual, ratones adaptados y webcams.

En la residencia de personas con discapacidad intelectual Santa Teresa, en Villafranca de los Caballeros (Toledo), contamos con materiales educativos digitales que tienen como objetivo promover y mantener las habilidades y capacidades de nuestros residentes de manera innovadora, lúdica e inclusiva.

Existe evidencias de que el uso de las nuevas tecnologías resulta beneficioso para personas adultas con discapacidad intelectual, sobre todo en mejoras cognitivas específicas como la memoria, percepción y atención. No solo buscamos que aprendan a manejar la tecnología, sino que también aprovechen las oportunidades de aprendizaje que esta brinda.

Los principales motivos que nos animan a utilizar este tipo de tecnología con personas con discapacidad intelectual son la accesibilidad (las aplicaciones educativas diseñadas para adaptarse a diferentes niveles de habilidad ofrecen herramientas y recursos accesibles), la adaptabilidad (la posibilidad de ajustar el tamaño del texto, la dificultad de las actividades y el tiempo de presentación de la información fomenta la participación), los programas específicos (existen programas diseñados para abordar problemas específicos como el lenguaje, memoria, atención, motor, entre otros), y la potenciación de la comunicación (se pueden desarrollar actividades grupales que fomenten las relaciones sociales a través de la cooperación).

Si bien las nuevas tecnologías ofrecen numerosos beneficios para potenciar y/o mantener las capacidades de personas con discapacidad intelectual, es fundamental considerar las habilidades y necesidades de cada usuario para garantizar una experiencia positiva y beneficiosas.

ISMAEL ALGAR LOMBARDO. Residencia Santa Teresa.

Jornada de convivencia intergeneracional con los chicos de ARB SAMU Motril

El equipo de ARB SAMU Motril ha organizado una jornada de convivencia entre los menores que son atendidos en este centro gestionado por Fundación SAMU y las personas mayores del Centro Residencial Costa Nevada. Un encuentro intergeneracional en la que todos los participantes disfrutaron a lo grande.

Dicha actividad tuvo lugar en las dependencias del Residencial Costa Nevada, ubicado en el municipio de Motril. Hasta allí se desplazaron los profesionales y los niños y adolescentes del ARB SAMU Motril. Estos llevaron también una merienda artesanal que previamente había sido elaborada en el centro.

La jornada de convivencia dio comienzo con la puesta en marcha de una actividad lúdica, el juego Pasalabra. Niños y mayores participaron en el juego, aportaron ideas y, sobre todo, favorecieron un entorno agradable en el que no faltaron las risas. Los más pequeños pudieron descubrir la agudeza mental de muchos de los participantes.

A continuación, todos disfrutaron de uno de sus juegos favoritos, el Bingo, continuando con un ambiente festivo y desenfadado.

Por último, se establecieron pequeños grupos que disfrutaron de juegos tradicionales como la Brisca, el Parchís o el Dominó, compartiendo estrategias y algún que otro truco que sorprendió a jóvenes y mayores.

Para finalizar la jornada, todo el grupo pudo disfrutar de la merienda y compartieron vivencias, experiencias personales y anécdotas que favorecieron un clima cercano y de confianza.

Aunque se esperaba que la actividad tuviese buena acogida, los resultados superaron toda expectativa, pues el equipo de profesionales pudo observar una implicación máxima por parte de los menores. Estos consiguieron salir de la rutina y hacer que el grupo de mayores disfrutase de una tarde diferente, aportando alegría, ilusión y cariño que fueron gratamente recibidos. Mayores y jóvenes agradecieron la creación de este espacio intergeneracional y mostraron gran satisfacción. Sin duda, este encuentro será el primero de muchos.

ARB SAMU Motril

Una nueva vida para Abdul gracias al proyecto PSH de SAMU

Hace más de 20 años, en 2003, un joven marroquí llamado Abdul llegó a España. Entró a través de Ceuta escondido en un camión que lo llevó hasta Ceuta y de allí a Puerto Real, en la provincia de Cádiz, donde la Policía lo encontró y fue trasladado a una vivienda de acogida. Hoy, Abdul tiene 41 años y es uno de los beneficiarios del programa de Fundación SAMU dirigido a personas sin hogar. Gracias a este proyecto, que funciona en cuatro provincias andaluzas desde el pasado año, Abdul puede disfrutar de un hogar y ha logrado un trabajo indefinido en un restaurante como camarero.

El programa PSH de SAMU es un servicio de inserción social y laboral a través de pisos de baja supervisión destinados a personas sin recursos económicos que tengan capacidad para acceder a un puesto de trabajo que le permita vivir de manera independiente. Este proyecto, que sacó a licitación pública hace un año la Junta de Andalucía, cuenta con financiación del Fondo Social Europeo.

El objetivo de esta iniciativa es acompañar a estas personas, la gran mayoría extranjeros de entre 19 y 55 años, en su itinerario de inserción sociolaboral mediante el apoyo en la formación, la realización de prácticas formativas y acuerdos de colaboración con empresas. “El fin principal es que estas personas se enganchen al mercado laboral y que puedan ahorrar mientras permanecen en el servicio con el fin de que, en un periodo de ocho a doce meses, puedan establecerse de manera independiente en una vivienda ajena al servicio”, explica Alba Garrido, coordinadora de este proyecto, que SAMU desarrolla en Cádiz, Sevilla, Córdoba y, más recientemente, Huelva.

En concreto, el proyecto cuenta con más de cuarenta pisos en total en los que cada uno viven tres personas.

“Mis primeros años en España los pasé en Sevilla, Puerto Real y Málaga, donde trabajé de pescador y en un lavadero de coches, pero no tenía papeles. Luego decidí ir a Galicia, donde estuve viviendo nueve años y pude regular mi situación. Y, finalmente, me trasladé al Campo de Gibraltar. Durante este tiempo conseguir un permiso de residencia, y ahora ya tengo uno de larga duración”, explica Abdul desde uno de los pisos de Fundación SAMU en Cádiz.

Abdul señala que pudo estudiar en Marruecos, pero que su familia era muy numerosa: “Éramos trece y no había nada de trabajo”. Antes de emigrar a España, se dedicó al contrabando de comida y productos de higiene en Ceuta y, luego, decidió ir a España para poder mejorar la situación económica de su familia. “Decidí emigrar a España y no a otro país porque estaba cerca, mi familia es del norte de Marruecos, además es un país donde existe una mezcla muy bonita y entrar en el país era posible. Por otro lado, España era un país seguro, y si tenía que dormir en la calle, no temía que me fuera a pasar algo”.

La situación de Abdul en España era relativamente buena. Tenía trabajo y sus papeles en regla, así que en 2020 decidió ir a Marruecos a visitar a su familia. Fue entonces cuando se desató la pandemia del coronavirus, España cerró su frontera con Marruecos y Abdul no pudo regresar. “Tuve que pasar toda la pandemia en mi país y, cuando pude regresar a España, no tenía trabajo y la cosa estaba muy difícil para conseguir un nuevo contrato en ese contexto. Fui a una trabajadora social, que me derivó a un albergue en Algeciras. Allí sólo estuve un día y, luego, me mandaron a otro albergue de La Línea durante seis días, a una residencia y a un piso de semiautonomía en Algeciras, donde estuve tres o cuatro meses. Luego, conocí a Fundación SAMU y su programa habitacional para personas sin recursos”.

Abdul entró en el programa PSH de SAMU en Cádiz en febrero de 2023. Ahora convive con un compañero, aunque hasta hace poco tiempo eran tres en el piso.

“En SAMU me han ayudado a tener una vivienda donde poder vivir. Para mí es un gran apoyo, es mi familia. Los profesionales de SAMU se preocupan por mí, me han ayudado a encontrar un trabajo y me apoyan en mi día a día. Puedo conversar con las técnicas del programa y desahogarme con ellas cuando algo me sobrepasa. Durante este año, he aprendido a tener paciencia y educación, sobre todo a respetar y a ayudar a mis compañeros y a luchar por mi futuro. Me han ayudado a forjarme una buena personalidad y a fijar mis objetivos”, explica Abdul. “Lo que más me gusta del programa es que me siento como en casa, siempre me apoyan y me escuchan. Me han dado mucha ayuda y estabilidad”.

Abdel estuvo repartiendo su currículum en varias empresas y establecimientos hosteleros hasta que el pasado verano le llamaron los dueños del Chiringuito Caramba, le hicieron una entrevista y le contrataron para la cocina del chiringuito, primero, y, luego, como espetero. “Primero estuve con otra persona, que me enseñó lo que debía hacer, y luego ya estuve solo. Al terminar la temporada, pasé a ser camarero en el Restaurante La Taberna, de los mismos jefes”.

Ahora, los objetivos de Abdel son seguir trabajando y encontrar una vivienda que reúna las condiciones para poder traer a España a su familia, pues está casado y tiene una hija de cuatro años. “Mis objetivos son encontrar una vivienda que reúna las condiciones para poder traer a mi familia de Marruecos y seguir trabajando para vivir una vida digna y feliz”.

Tres años de investigación científica en SAMU

El Instituto SAMU de Investigación Científica (ISIC) cumple este mes de febrero su tercer año de vida. Fundación SAMU puso en marcha este órgano que aglutina todos los proyectos de investigación en materia de salud, servicios sociales y nuevas tecnologías de SAMU en febrero de 2021. Se activó con el propósito de recopilar, producir y transferir las iniciativas, proyectos e investigaciones que se realizan en las diferentes áreas funcionales de SAMU, además de Escuela SAMU y la clínica de salud mental SAMU Wellness. Este proyecto se ha visto fortalecido gracias a los convenios de investigación firmados con diversas instituciones académica, entre ellas la Universidad de Sevilla, la Universidad Loyola o la Universidad Pablo de Olavide.

“SAMU ha demostrado una excelente motivación investigadora desde sus inicios en 1981 con el Grupo de Investigación Operativa del área de Emergencias. Asimismo, destaca su amplia producción científica a lo largo de sus 35 años de postgrado universitario con una producción de más de 1.300 trabajos académicos”, explica Maribel Álvarez Leiva, directora del área Hospitalaria de SAMU.

“SAMU tiene como objetivo convertirse en Agente del Conocimiento en Andalucía y en figuras análogas en otras comunidades autónomas. Esto exige demostrar una clara actividad investigadora a través de un órgano propio que aglutinar y transfiera la producción científica generada en sus diferentes áreas funcionales”, continúa Álvarez Leiva.

Los objetivos del ISIC son impulsar proyectos de investigación en los campos de la salud, bienestar social y educación; aglutinar y coordinar la actividad investigadora y de divulgación científica ya existente en SAMU; publicar libros científicos y facilitar la publicación de artículos de SAMU en revistas indexadas; participar en grupos de trabajo relacionados con la investigación y el desarrollo; y favorecer que el profesorado de SAMU pueda tener actividad investigadora con respaldo universitario, entre otros.

Dentro del ISIC, hace ahora dos años, en enero de 2022, nació la Academia SAMU como espacio y agente de educación superior para la plantilla de SAMU. Su objetivo es contribuir a la capacitación de los jóvenes talentos y directivos de la organización para que desempeñen un liderazgo que les permita abordar los retos actuales, como la humanización, la sostenibilidad, la innovación y la digitalización.

El programa de la academia comprende acciones formativas de diferentes niveles y temáticas en formato de cursos, seminarios, talleres y/o eventos académico-científicos. Entre las acciones formativas llevadas a cabo en 2023 destacan el curso de Alta Representación Institucional, en el que participaron 23 directivos y gerentes de todas las áreas de SAMU; y el curso de Excelencia en la Gestión de Servicios y Centros Sociales y Sociosanitarios, en el que ya han participado 87 directivos en sus tres ediciones.

También se ha llevado a cabo una formación intensiva dirigida a directivos noveles o cargos intermedios para identificar y fomentar el talento. Fueron unas jornadas de convivencia en el alojamiento municipal Casa Pingo en Berrocal (Huelva), en las que se pretendía detectar el talento dentro de los directivos noveles e inculcar los valores institucionales. En este curso participaron 14 profesionales de SAMU.

Hay que sumar las I Jornadas Internacionales sobre Experiencias e Iniciativas en Innovación Social, en las que participaron 372 personas de manera telemática, y la reunión plenaria anual de jefes y directores que congregó a 104 personas.

Con respecto a la formación externa, destacan el Curso de Voluntariado en Emergencias Sociales a través de la Cátedra de Innovación Social SAMU y la Universidad Pablo de Olavide; y el curso de Autocuidado y Hábitos de Vida Saludable organizado por la Universidad Nacional de Educación a Distancia (UNED).

Este año, la Academia SAMU también ha impulsado el desarrollo de cinco proyectos: el programa Lazos, que tiene como finalidad aumentar las redes de apoyo en personas con trastornos mentales a través de actividades lúdicas y culturales; un proyecto de investigación acerca de las personas sin hogar; un mapeo del perfil de salud mental y bienestar emocional del alumnado universitario; el proyecto Soledad No Deseada, que nace de la unión de la Fundación Curar y Cuidar y la Fundación SAMU con el objeto de trabajar en el estudio de la soledad no deseada entre las personas mayores; y otro que evalúa la eficacia en el manejo de la silla de ruedas desde la perspectiva del cuidador y la carga mental que genera.

Academia SAMU, además, cuenta con un programa de doctorado, Mentoring Doctorando, que tiene como objetivo principal incrementar el número de profesionales de SAMU con tesis doctorales. En 2023, 18 profesionales de SAMU de diferentes áreas participaron en este programa.

Cátedra de Innovación Social

Otro de los grandes proyectos impulsados por el ISIC ha sido la creación de la Cátedra de Innovación Social junto con la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla. Su objetivo es establecer un marco de colaboración para el desarrollo del conocimiento en el área sociosanitaria a través de la innovación social. Esta cátedra permite llevar a cabo actividades de formación, tanto reglada como no reglada, y promover la cooperación educativa entre ambas entidades para la mejora de la empleabilidad de los estudiantes. Está prevista la concesión de becas, ayudas y premios.

En investigación, se impulsa el desarrollo de nuevas líneas de trabajo relacionadas con la innovación social del tercer sector y la elaboración de informes y estudios en los ámbitos de la salud y la acción social. Uno de los proyectos desarrollados es un mapeo del perfil de la salud mental y el bienestar emocional de los universitarios.

Entre las actividades celebradas en 2023 destacan las I Jornadas Internacionales sobre Experiencias e Iniciativas en Innovación Social (23, 24 y 25 de febrero de 2023) dirigidas a profesionales del ámbito sociosanitario. Participaron 174 personas. Se presentaron 19 comunicaciones en formato póster y 33 comunicaciones orales, 21 ponencias y 2 conferencias magistrales.

También se celebró el curso de Voluntariado Universitario en Emergencias Sociales del 31 de enero al 14 de febrero.

Alliance 4

El ISIC también lidera la iniciativa internacional Alliance for Migration Research (Alliance 4), que goza de acuerdos con universidades de Europa, Estados Unidos y América Latina. Está financiada por Fundación SAMU y su filial en Estados Unidos, SAMU First Response, y su objetivo es facilitar un ambiente académico internacional para impulsar las investigaciones relacionadas con las migraciones alrededor del mundo y su impacto en las naciones anfitrionas. universidades, administraciones públicas, empresas y organizaciones benéficas pueden unirse a esta alianza para la investigación sobre migraciones de forma gratuita. Profesores, médicos y estudiantes de doctorado también podrán postularse de manera individual.

Entre las líneas iniciales de investigación destacan el impacto económico de la migración, la salud mental y emocional de los inmigrantes, la perspectiva de género, menores inmigrantes, mejores prácticas de los servicios sociales, racismo o la migración como factor de reducción de la pobreza y desarrollo, entre otros.

Ya han confirmado su presencia en la alianza American University, a través de su Centro de Estudios Latinoamericanos y Latinos (Washington DC, EE.UU); ISIC (Sevilla, España); CISDE-Campus Internacional para la Seguridad y la Defensa (Sevilla, España); y la Universidad Pablo de Olavide, a través de la Cátedra de Innovación Social (Sevilla, España). Y hay una treintena de entidades e instituciones de todo el mundo invitadas a la reunión de lanzamiento prevista para el 16 y 17 de octubre de 2024 en Sevilla.