Islas Baleares: un modelo de esperanza y humanidad en la atención de menores
En las costas de Islas Baleares, cada niño, niña, adolescente migrante no acompañado (en adelante NNAMNA) que llega tras cruzar la peligrosa ruta argelina, trae consigo una historia de vida cargada de lucha, esperanza y valentía. Desde que se inició el servicio de atención a menores migrantes no acompañados el 28 de noviembre de 2021, la respuesta en Islas Baleares ha sido mucho más que un despliegue operativo, ha sido un acto de humanidad en su forma más pura. Desde el primer centro con capacidad para ocho menores hasta los 13 centros operativos actuales, Fundación SAMU ha experimentado una transformación basada en la excelencia y la empatía, demostrando que el crecimiento puede ser compatible con una atención personalizada y de calidad.
Debido a la alta demanda, en 2024, Fundación SAMU abrió en el archipiélago balear nueve nuevos recursos, cinco de ellos en el último trimestre, lo que ha permitido atender a 534 menores en el último año en 13 centros.
Detrás del crecimiento y la consolidación de la red de atención está el liderazgo inspirador de Suhaila El Haddad, directora de Islas Baleares de Fundación SAMU. Bajo su visión, los centros de acogida se han convertido en espacios donde los NNAMNA no solo encuentran refugio, sino también una oportunidad para reconstruir sus vidas. Estos menores llegan con cicatrices visibles e invisibles, resultado de un viaje lleno de riesgos. Por esta razón, los centros de acogida no son simplemente lugares donde se cubren necesidades básicas, son entornos seguros donde encuentran consuelo, apoyo emocional y una nueva esperanza.
Suhaila El Haddad ha liderado con empatía y determinación los centros de estas islas, entendiendo que cada menor es una historia de superación que merece un futuro digno. Su sensibilidad para diseñar programas que abordan las heridas emocionales, al tiempo que les ofrecen herramientas para crecer, ha hecho que esta red sea un modelo de atención integral.
Cada menor migrante que pasa por los centros gestionados por Fundación SAMU encuentra una mano que lo guía hacia la independencia y la autosuficiencia. Desde el aprendizaje de un idioma hasta la formación en habilidades laborales, cada paso dado dentro de esta red de atención está diseñado para empoderar a los NNAMNA y recordarles que su futuro aún está por escribirse.
El Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS) ha demostrado que la solidaridad puede ser la piedra angular de una sociedad inclusiva. Su compromiso no solo garantiza que los NNAMNA reciban atención, sino que fomenta la comprensión y la empatía entre la comunidad local.
Por su parte, Fundación SAMU, con su capacidad para reunir a equipos humanos excepcionales, como el equipo de Islas Baleares, ha transformado cada desafío en una oportunidad para ofrecer una atención que va más allá de lo material. Es la combinación de esta solidaridad institucional y la dedicación diaria de este equipo de profesionales lo que ha permitido que cientos de NNAMNA encuentren en Islas Baleares un punto de partida para una nueva vida. La red de atención en este archipiélago no solo atiende a menores, transforma vidas.
En un mundo donde las fronteras dividen y la desesperación empuja, las Islas Baleares demuestran que la solidaridad, la humanidad y la esperanza pueden ser más fuertes que cualquier desafío. Porque cada niño merece algo más que sobrevivir, merece vivir con dignidad y soñar sin límites. En Islas Baleares esos sueños encuentran un lugar donde empezar.
Autora: SIHAM KHALIFA
Directora nacional adjunta del área de Infancia y Familia de SAMU