Escuela SAMU: Cuando los sanitarios trabajan en un entorno hostil

La asistencia sanitaria en situaciones de catástrofe o con múltiples víctimas es un proceso complejo en el que unas correctas actuación y atención se presentan como uno de los retos más importantes, junto a una perfecta coordinación de todos los intervinientes. Los profesionales del sector de las emergencias involucrados en un IMV (Incidente con Múltiples Víctimas) se ven inmersos en situaciones especiales, ya no solo por la asistencia in situ de las víctimas, sino también por la necesidad de una coordinación y organización para poder controlar el escenario y realizar una evacuación ordenada de los heridos.

La comunicación se convierte en un pilar muy importante en este tipo de situaciones. Los enfermeros deben estar formados para poder ofrecer una respuesta rápida, segura, organizada y coordinada con otros profesionales de los cuerpos y fuerzas de seguridad del Estado, con el fin de neutralizar rápidamente la amenaza, evitando así que haya más víctimas y asegurando una eficaz y rápida asistencia sanitaria en un entorno complejo.

Por esta razón, los alumnos del Máster de Enfermería en Urgencias, Emergencias, Catástrofes y Acción Humanitaria de SAMU y la Fundación San Pablo Andalucía CEU participan cada año en el módulo de Atención en Incidentes de Múltiples Víctimas (IMV), que este año se celebró del 10 al 13 de mayo y contó con la colaboración de un grupo de militares del Segundo Escuadrón de Apoyo al Despliegue Aéreo (Seada) de la Base Aérea de Morón (Sevilla).

“El objetivo de este módulo es que los alumnos conozcan los diferentes equipos de emergencias que existen, cómo funcionan, cómo se coordinan, cuáles son sus protocolos de actuación y aprendan a trabajar en equipo, por ello contamos con la colaboración en el módulo de miembros de la Policía Nacional, Guardia Civil, militares o bomberos”, explica Lucía Sánchez, enfermera y docente de Escuela SAMU. “Además, es imprescindible que el personal sanitario conozca conceptos y procedimientos elementales de medicina táctica y cómo se aplican en el marco de la asistencia sanitaria en entornos hostiles. La formación en este campo es una demanda cada vez más creciente en nuestro entorno profesional debido al riesgo de la amenaza cada vez más latente en la sociedad actual”.

Desde hace tres años, Escuela SAMU cuenta con la colaboración del Seada de Morón durante el módulo de IMV. “Varios militares formados como paramédicos acuden al módulo como alumnos para refrescar sus conocimientos y, en compensación, nuestros alumnos reciben formación en medicina táctica y protección individual”, señala Lucía Sánchez.

Otros de los objetivos formativos de este curso son movilizar e inmovilizar a las víctimas, realizar acarreos y arrastres para evacuaciones rápidas, realizar triaje adaptado a las circunstancias, conocer los protocolos y materiales de control de hemorragias en IMV, manejar torniquetes, actualizar la asistencia y trazabilidad del paciente en IMV y conocer la dinámica de trabajo de los distintos profesionales intervinientes, entre otros.