Escuela SAMU inaugura el curso 2019/2020 en el Ayuntamiento de Gelves con instalaciones renovadas

Escuela SAMU, uno de los centros de referencia en el sur de Europa en la formación de profesionales de las emergencias sanitarias, ha celebrado este lunes el acto de inauguración del curso 2019/2020 en el Ayuntamiento de Gelves (Sevilla), donde se sitúa la sede de la organización y su campo de adiestramiento.

Más de 100 alumnos de los cursos de Formación Profesional de Técnico de Emergencias Sanitarias (TES), Técnico en Cuidados Auxiliares de Enfermería (TCAE) y Técnico en Integración Social (TSIS) han participado en el evento junto al equipo docente que les acompañará durante su formación. Estos alumnos son los primeros en iniciar su trabajo en la escuela, ya que los estudiantes de los másteres universitarios comenzarán el curso en octubre.

El acto ha estado presidido por Alicia Oliveros Cordones, concejala de Salud, Cultura y Empleo del Ayuntamiento de Gelves. Oliveros ha recordado a los alumnos “la maravillosa oportunidad” que tienen delante y les ha animado a “intentar sacar el máximo partido posible” a este curso académico. “El Ayuntamiento de Gelves está para apoyar a vuestra escuela en todo lo que sea posible”, señaló la concejala.

La representante del gobierno municipal ha estado acompañada por el doctor Carlos González de Escalada, director general de SAMU; Juan González de Escalada, director de Escuela SAMU; Ana Solís Cuadrado, jefa del departamento de Servicios Socioculturales y de la Comunidad de Escuela SAMU; y María Oliva Román, alumna egresada de TES de la promoción 2017-2019.

María Oliva Román ha recordado sus dos años de formación en la Escuela como una experiencia única desde los puntos de vista personal y profesional: “La experiencia en SAMU ha cambiado mi vida, tanto en la forma de ver las cosas como de hacerlas. Y SAMU también me ha enseñado que todo esfuerzo tiene su recompensa”, ha subrayado.

Estamos ante la séptima promoción de cursos de FP impartidos en Gelves. El director general de SAMU ha resaltado las obras de mejora que se han acometido este verano en la Escuela tanto en las instalaciones como en los equipamientos del centro de formación, que se sitúa “entre los más importantes de Europa”. “Estamos construyendo un nuevo aulario y una clínica para que podáis realizar prácticas en un entorno lo más real posible. Además, vamos a adquirir nuevos vehículos y una embarcación para fomentar la formación en rescate náutico; y queremos incorporar un gabinete de atención odontológica para una futura formación en higienista dental”, ha explicado Carlos González de Escalada. “Queremos que dispongáis de los mejores recursos porque la sociedad necesita profesionales con mayúsculas”.

González de Escalada ha subrayado la importancia de la relación entre la Escuela y el municipio en el que se ubica. “El apoyo del Ayuntamiento y de los ciudadanos de Gelves es tan importante que nuestra Escuela no se entiende sin Gelves, al igual que Gelves no se entiende sin su escuela de emergencias”, ha destacado.

Durante el acto de inauguración del curso, los alumnos con mejores expedientes académicos del año pasado han recibido diplomas honoríficos. Son Carmina Casal Ruiz, alumna del curso de TES en la modalidad presencial, y José Ángel Amuedo Mateo, alumno del curso de Técnico en Integración Social.

inauguración curso 2019/2020 Escuela SAMU 2

Dos de los alumnos con mejores expedientes del pasado curso 2018-2019.

Antes de finalizar el acto, el director de la Escuela, Juan González de Escalada, ha anunciado como primicia a los alumnos presentes que este año podrán aspirar a cuatro plazas de un programa de formación internacional en emergencias en Estados Unidos entre los meses de diciembre y enero, gracias a un acuerdo de colaboración con el centro de entrenamiento Echo Hose. “Ésta es una gran oportunidad y una gran guinda al pastel en vuestros currículums”, destacó el director.

Otra de las grandes novedades de este año es el debut de Escuela SAMU como centro oficial de formación NAEMT (National Association of Emergency Medical Technicians), organización líder a nivel internacional en programas educativos de emergencias sanitarias. La escuela se convierte así en el primer centro de formación de España en conseguir este importante certificado.

Hasta ahora, Escuela SAMU acogía en sus instalaciones cursos de NAEMT dirigidos a profesionales del sector de las emergencias que buscaban mantener el máximo nivel de especialización con una formación continua. A partir de ahora, Escuela SAMU no sólo cederá sus instalaciones y recursos, sino que pasa a ser un centro NAEMT de manera oficial, lo que le concede autonomía para gestionar, planificar y organizar dichos cursos.

Escuela SAMU se estrenará como centro NAEMT el próximo 18, 19 y 20 de octubre con uno de los cursos más famosos y demandados de la organización americana, el Prehospital Trauma Life Support (PHTLS), un programa líder mundial en el manejo prehospitalario de los pacientes politraumatizados.

Escuela SAMU es un centro líder en formación especializada en urgencias, emergencias, atención a las catástrofes y acción humanitaria, con más de 30 años de experiencia. Sus instalaciones cuentan con una superficie de 17.000 metros cuadrados y están dotadas de infraestructuras punteras capaces de ofrecer una formación de excelencia a los cientos de alumnos que cada año pasan por sus aulas. El lema de la escuela es “aprende haciéndolo”.

El poder de un par de ‘derbukas’

Es fin de semana. La tarde se presenta fresca y tranquila en este pequeño y encantador pueblo de la Sierra de Aracena (Huelva). Los menores del ISL Corteconcepción (centro de inserción social y laboral) salen a pasear y a disfrutar de la calma que regala las calles de esta localidad, la cual les ha acogido con todo el respeto y familiaridad que se merecen nuestros chicos, esa familiaridad que les ayuda a acercarse, un poco más, a sus lugares de origen y les hace sentir menos lejos de sus familias y su cultura.

Para el desarrollo de las actividades del turno de tarde, una de las educadoras ha traído un par de derbukas, instrumento de percusión de origen árabe, usado en todo el Oriente Próximo y el Magreb. Para nuestra sorpresa, hay algunos chicos en el grupo que saben tocar con destreza este instrumento. Los menores comienzan a hacerlos sonar con timidez. El resto del grupo observa entusiasmado. Poco después, comienzan a relajarse y sentirse más confiados para expresar lo que sienten al escuchar los ritmos de su tierra. Finalmente, se da lo inevitable, la alegría de compartir: los chicos comienzan a bailar.

Desde una visión de intervención integradora y terapéutica, en el ISL Corteconcepción trabajamos con la firme convicción de que la música es un proceso destinado a facilitar y promover comunicación, aprendizaje y movilización de nuestro menores. Usamos la música como una herramienta, un canal hacia la libertad y el empoderamiento que nuestros chicos necesitan, ahora más que nunca, por estar viviendo una situación personal complicada y muy dura al estar lejos de sus familiares y su cultura. Nuestro equipo educativo, tiene la firme convicción de que la música es un vehículo que ayuda a mejorar el estado de ánimo de los menores y la expresión de sentimientos, así como favorecer el desarrollo emocional y afectivo de nuestros chicos.

Música que sana, que cura, que une.

Autora: Aurora Carrasco. Jefa de Unidad ISL Corteconcepción (Huelva)

COISL Motril: Cruzar la puerta del mercado laboral

Coincidiendo con el periodo de vacaciones, en el Centro de Orientación e Inserción Sociolaboral SAMU de Motril hemos intensificado nuestro trabajo para fomentar la inserción laboral de los chicos mediante la realización de prácticas formativas. Hemos contactado con numerosas empresas de la zona para conseguir establecer convenios de colaboración que permitan a nuestros chicos tomar contacto con el mundo laboral y formarse desde dentro de la empresa en aquellos sectores que son más acordes con sus características y preferencias.

Este tipo de prácticas abren una puerta hacia el mundo del trabajo ya que permiten a los chicos formarse en un puesto determinado y mostrar su valía y sus ganas. Además, son muchos los casos en los que los menores son contratados en las empresas tras finalizar un periodo de prácticas formativas ya que las empresas suelen quedar bastante satisfechos con su labor.

En el COISL SAMU de Motril contamos con un total de 45 convenios de colaboración con distintas empresas de la costa tropical de Granada. Eso nos ha facilitado que actualmente 14 de nuestros menores realicen prácticas formativos y que cinco estén contratados en varias empresas. De las 22 plazas del centro, 19 de nuestros chicos se encuentran disfrutando de una experiencia formativa o un contrato laboral que será clave para su futuro.

Colaboran con este proyecto Lirola Ingeniería y Obras, Comercializaciones Cultivos del Levante, Motrileña de Climatización, Mas ke Pizza, Hamburguesería Cómeme, Frutas Tejerina, Distribuidora Moronsan, Productos Jema, SCA, Factory Electrodomésticos, Restaurante La Ballena Azul, Restaurante Katena, Agrocereales G&A, World Vypmar y Peluquería Alandalus.

 

Autora: Carmen Calles Molina. Orientadora laboral de COISL SAMU Motril

Carta de un menor: Paso a paso hacia el futuro

Yo vivía en Marruecos. Allí nací, estudié y trabajé para ayudar a mis padres con los gastos del hogar. Un día pensé: “¿Por qué sigo viviendo en la mentira? Aquí en mi país no llegaré a nada”. Lo pensé durante meses. Y decidí emigrar.

Mientras cruzaba el Estrecho en patera pensaba si llegaría a tocar tierra o si mis sueños se verían truncados en el mar. Pasé mucho miedo. Todos en la patera pasamos mucho miedo. Sólo me mantenía cuerdo la idea de llegar y tener un futuro que me permitiera ayudar a mi familia.

La llegada a España no fue como esperaba. Creo que no lo fue para nadie. Pasé por muchos centros: Arcos, Bornos, Marchena, Málaga… Hasta llegar a Guillena. Aquello no me gustaba. No quería estar allí, pero poco a poco los chicos y los educadores y educadoras que allí estaban conquistaron mi corazón.
Después de Guillena llegó Pino Grande, donde veía cada vez más lejos mis planes de futuro. Un buen día nos trasladaron al centro de Valencina y poco a poco la situación fue mejorando. Pude ver cómo todas las piezas se iban moviendo y encaminando hacia lo que yo quería: formación y trabajo para labrarme una vida aquí en España.

Hoy uno de mis sueños se ha hecho realidad. Estoy en otro país. Ahora estoy tratando de lograr mi segundo sueño: trabajar y tener un buen futuro.

Un día la directora del centro de SAMU me llamó y me comunicó que tenía una oportunidad. Me sorprendió mucho ser la persona elegida entre todos mis compañeros. Estoy muy contento y feliz. Me ofrecieron la oportunidad de hacer prácticas en una empresa, lo que me abriría puertas.
El primer día estaba nervioso y ansioso a la vez. Me acompañó una educadora que me ayudó con los papeles y con toda la información (horarios, autobuses…) que me proporcionaron.

Ahora me levanto todos los días a las 5:30 de la mañana para poder estar en mis prácticas a las 7:30, y allí permanezco hasta las dos de la tarde. Los trayectos los hago en autobús. El primer día iba un poco asustado. Tenía que coger varios y no sabía si llegaría a mi hora. Ahora voy tranquilo, me siento muy bien haciendo las labores que me mandan. Estoy aprendiendo mucho. Mi jefe es una buena persona y me siento acogido por todos mis compañeros y compañeras de trabajo. Siento que esto es un pasito más que me acerca a mi sueño.

Le agradezco a mi centro, a mis educadores y, sobre todo, a Fundación SAMU que han hecho y hacen lo imposible para que yo tenga un buen futuro. Doy las gracias por ello, a ellos y a todas las organizaciones que luchan porque los chicos como yo tenga una vida mejor.

Cuando Abdoulaye se quitó el gorro

Abdoulaye. Así se llama un chico senegalés de 17 años del ISL Alcalá y ésta es su historia. Hijo único y huérfano de padre, tuvo que ayudar a su madre en tareas domésticas y laborales para ingresar algo de dinero en su casa. Trabajaba como comerciante con su madre y además como taxista con su moto. Un contexto ya difícil que, además, se vería marcado por la mala suerte en forma de un aparatoso accidente de tráfico. Las consecuencias sobre el joven fueron tan graves que le provocan la pérdida de la visión de un ojo y una deformación craneal que no mejoró tras la cirugía. Tras este varapalo, y después de recuperar fuerzas, Abdoulaye decide cruzar el Estrecho con un objetivo claro: ayudar a su madre e intentar buscar una solución médica para su problema.

Antes de llegar al ISL Alcalá, su periplo fue largo. Buscó un contacto en su país de origen para conseguir llegar a Tánger, desde donde cruzó la frontera a bordo de un camión. Al llegar a Cádiz, un paisano le llevó en coche hasta Sevilla, donde pasó doce días viviendo en la calle hasta que un vecino se percató de su situación y llamó a la policía, que le trasladó a un centro de acogida de Carmona y, posteriormente, al ISL Alcalá, gestionado por Fundación SAMU.

A su llegada al centro se mostró dubitativo pero tranquilo, con su cabeza cubierta por un gorro que no se quitaba nunca. A pesar de sus circunstancias se mostraba activo y no temía relacionarse. Abdoulaye, finalmente, consiguió mostrar su personalidad sin problemas ni tapujos. Rápidamente se ganó el cariño y respeto de sus compañeros ayudando a todo el mundo, participando en las actividades y siendo responsable con su entorno.

Todo iba bien hasta que observamos que el joven no realizaba salidas autónomas del centro. Esa particularidad física frenaba sus ganas, pero no su personalidad, porque acudió al equipo educativo del centro para exponer su frustración, la que era su barrera para seguir creciendo.

Desde el equipo se le escuchó, se le proporcionaron herramientas y se le motivó para que siguiera avanzando en su proceso migratorio y vital, porque otro dato importante es que el joven Abdoulaye nunca ha estado escolarizado, aunque cualquiera lo diría por su interés en aprender, su atención y su esfuerzo diario para aprender el idioma y progresar.

Un día, Abdoulaye se llenó de fuerzas, de energía, de autoestima e hizo lo que todos estábamos esperando: pidió su tarjeta de salida y se fue a dar un paseo, rompiendo así la barrera de la observación externa, de las miradas, de los comentarios, de todo aquello que puede frenar a una persona a alcanzar sus objetivos diarios y vitales.

Así pues, Abdoulaye ahora afronta con una visión distinta su presente, su futuro y sus procesos migratorio y de vida. Sin olvidar sus objetivos. Cuidándose. Y, de vez en cuando, quitándose el gorro.

Los nuevos vecinos de El Castillo de las Guardas

El Castillo de las Guardas (Sevilla) se caracteriza por ser un pueblo pequeño en cuanto a su número de habitantes pero grande por su hospitalidad. El vecindario de esta localidad ha abierto sus corazones para dar la bienvenida a los menores del centro. Son muchas las personas que nos dicen que han vuelto a dar vida al pueblo y es que estos menores llenan las calles de risas, de colores y de saludos allá por donde caminan. Los ojos curiosos miran desde las puertas de sus casas o desde las terrazas de los bares y se contentan cuando ellos les responden con un “buenas tardes”. Menores del pueblo ya saben sus nombres, y se les refleja alegría en sus caras cuando se cruzan con nuestros chicos en la calle.

Después de dos meses viviendo en esta localidad, los menores ya conocen sus rincones más bellos, sus gentes y sus vistas. Cada tarde es un momento de descubrimiento, de hacer nuevas amistades y de compartir juegos y risas. La pista de fútbol se ha convertido en el lugar favorito para ello y ahora se ve más llena de vida. Entran con soltura en la panadería y en el quiosco donde compran sus chucherías. Esto es lo positivo de vivir en el pueblo: la comunicación, la cercanía que transmite, sus oportunidades formativas y laborales, el buen ambiente y sus paisajes.

En El Castillo de las Guardas prima la comunicación entre sus habitantes y los menores ya han aprendido que es parte fundamental para convivir y conectar en esta localidad. Ellos se hacen conocer y querer. Sus ganas de aprender el idioma y la cultura, de trabajar y de ayudar a los demás los hace grandes. Tienen muchas iniciativas y siempre están dispuestos a colaborar en cualquier actividad. Muestran cariño y respeto por las personas más adultas y no tan adultas. Todas estas situaciones nos provocan un enorme orgullo a todas las personas que formamos parte del equipo de SAMU de El Castillo de las Guardas.

Nuestro reto sigue siendo conseguir una integración plena y acompañarles en sus proyectos de futuro, trabajando en el impulso y en el ánimo para alcanzar metas que a veces parecen demasiado lejanas, y contando con la colaboración del vecindario. Pero, sin duda alguna, el protagonismo lo tienen ellos y juntos lo estamos consiguiendo. Toca avanzar y transformar.

Mujeres de la élite de las Fuerzas Armadas de Perú se forman en emergencias sanitarias con SAMU en Sevilla

SAMU formará durante 30 meses en Gelves (Sevilla) a tres mujeres médicas de la élite de las Fuerzas Armadas de Perú en un programa académico en atención prehospitalaria, emergencias, catástrofes y gestión de crisis, y prevención de riesgos de desastres. Estas tres oficiales ya están en la ciudad, como resultado de un convenio firmado por la organización sevillana y el Ministerio de Defensa del país andino.

La mayor (comandante) Carol Janeth Arias Fajardo del Ejército de Tierra; la teniente primero Mariel Sayuri Jaimes Ferreyra perteneciente a la Marina; y la capitana médico Shaila María Clara Caqui Yanet, de la Fuerza Aérea de Perú, ya han empezado su adiestramiento en SAMU.

Durante dos años y medio, recibirán una formación exhaustiva especializada en urgencias, emergencias y acción social y humanitaria, que incluye su participación en el Máster de Emergencias Médicas de SAMU y la Fundación San Pablo Andalucía CEU.

Su adiestramiento también contempla los cursos especializados en medicina táctica que imparte Escuela SAMU, como el curso de Prehospital Trauma Life Support (PHTLS), que cuenta con la acreditación de la National Association of Emergency Medical Technicians (NAEMT), líder mundial en programas educativos de emergencias sanitarias, entre otros.

“Tenemos unas expectativas muy altas. Nuestra meta es afianzar nuestros conocimientos y adquirir otros nuevos que nos permitan abrir en Perú una escuela de emergencias similar a la que SAMU tiene en Sevilla”, ha explicado la mayor Arias Fajardo. “La Marina sí cuenta con cursos similares, pero no son tan completos ni de tan alto nivel como el que tienen aquí”.

Además de su formación, estas oficiales también participarán en el resto de servicios profesionales de SAMU, como el traslado de pacientes críticos, o en los diferentes dispositivos sanitarios llevados a cabo por la entidad en Sevilla, como, por ejemplo, el que desplegará el 27 de septiembre con motivo de la Carrera Nocturna del Guadalquivir o las coberturas de emergencias de los partidos del Sevilla FC.

El director general de SAMU, Carlos González de Escalada, ha explicado que este acuerdo con el Ministerio de Defensa de Perú es un gran desafío tanto para las tres oficiales médicas como para la propia organización. “El convenio será un escenario de transferencia de tecnología, intercambio de experiencias, actividades de investigación científica y organización de programas académicos de alcance internacional”, ha subrayado De Escalada.

SAMU es una organización pionera en España en el sector salud, acción social y emergencias, con más de 37 años de experiencia. Cuenta con 42 sedes en seis comunidades autónomas y presencia internacional en Estados Unidos, tiene una plantilla de más de 1250 profesionales y ha formado a más de 11000 alumnos en salud y emergencias a través de su Escuela SAMU, con sede en Gelves (Sevilla).

Carta de despedida desde SAMU Rivas: “Todo lo que no pude deciros”

Cuando alguien se plantea trabajar con menores y además tiene una determinada edad, lo primero que piensa es: «¡Qué pereza!». Después de unos años sin que mi trabajo estuviese relacionado con adolescentes, volví con ellos. Y mi experiencia no ha sido nada parecida a lo que pensaba.

Llegaron a una nueva casa. Nueva era yo para ellos, y ellos para mí. Ahí estaban. Con su pequeña maleta cargada de rebeldía, de pensamientos inmaduros en la mayoría de ellos, de miedo y expectación. Pero también cargada de sueños, ilusiones y experiencias que vivir.

Quiero deciros que, aunque habéis sacado lo peor de mí en muchos momentos, y que en algunos otros os he odiado, todo hay que decirlo –odiar es una emoción pasajera y, por suerte, reversible, mis queridos chicos–, también he sentido mucha ternura y mucho cariño –porque también queréis–. Me he sentido muy acompañada –porque dais calor–. ¡Cuántas sonrisas me habéis robado, mis buenos ladrones!
Me habéis transmitido la emoción de ser joven. Esas risas disparatadas, esos juegos que después de una determinada edad es difícil que vuelvan. ¡Cuántos abrazos, besos y también lágrimas! Unas veces amargas y otras, tan dulces como vuestras sonrisas.

No ha sido mucho tiempo el compartido, apenas ocho meses, pero me llevo un trocito de todos y cada uno de vosotros. Un trocito que recordaré e intentaré cuidar. Un trocito que guardo en el cajoncito de las buenas cosas vividas.

Espero que la injusticia, la intolerancia, la falta de conciencia y de respeto hacia las personas no borren vuestra luz, y que podáis brillar más allá de prejuicios, estereotipos o trámites administrativos. Algunos ya lo estáis haciendo y otros lo conseguiréis. Ojalá se cumplan vuestros sueños. No os olvidéis nunca de ellos, os los merecéis.

Os deseo lo mejor y para vosotros es hoy mi mejor sonrisa, pero tenéis que permitirme que os diga por última vez: ¡Portaos bien! Hacedlo con vosotros mismos y con los demás, y jamás os dejéis de querer. ¡Corred! ¡Corred tras vuestros sueños, mis queridos niños!

Autora: Lola Piñero Vázquez. 
Exeducadora de SAMU Rivas.

Sueños en la Alhambra

Washington Irving escribió: “Estoy pisando una tierra encantada y me encuentro rodeado de románticos recuerdos. […] Fue siempre esta ciudad objeto que despertó mis sueños; mi fantasía recorrió con frecuencia las románticas estancias de la Alhambra. Y he aquí, por vez primera, realizado un sueño. Sin embargo, no doy crédito a mis sentidos y hasta dudo que habite el palacio de Boabdil o que contemple la hermosa Granada desde sus balcones”.

Con la misma fascinación del escritor estadounidense del Romanticismo, los menores de RB Motril de SAMU tuvieron la oportunidad de visitar este lugar mágico: la Alhambra, el Castillo Rojo, Fortaleza del Reino de Granada y corazón de la misma.

Algunos de ellos no conocían su historia, y quedaron asombrados al conocer las batallas, logros y sucesos que tuvieron lugar en esas paredes rojizas. Se sintieron muy cerca de sus orígenes en cada escritura árabe que adornaba sus rincones, compartiendo su significado con los compañeros que desconocían el idioma. Y a su vez, orgullosos, cuando escuchaban a los guías hacer hincapié en la riqueza que la civilización musulmana, en su paso por España, nos había dejado. Gracias a su pasión y culto por el agua, a la vegetación y a sus conocimientos arquitectónicos llenos de gran talento, minimalismo y perfección, podemos disfrutar hoy en día de lugares como la Alhambra, el Generalife, la Mezquita de Córdoba, la Giralda de Sevilla y la Alcazaba de Málaga, entre otros.

En Fundación SAMU intentamos dar respuesta a las necesidades de estos jóvenes. No sólo a las más básicas, sino también a las que intentan fomentar su diversión y aprendizaje, las cuales puedan recordar cuando sean mayores y les hagan crecer como personas.

Estos jóvenes llegan a nuestro país solos, con dudas, asustados. Y aunque desde nuestra fundación trabajemos a diario la integración, vivimos en una sociedad que, en ocasiones, no lo pone fácil. De ahí la importancia de que ocupen un lugar en ella.

Allí se sintieron parte de nuestra historia, parte de un todo que desemboca en el mismo lugar, las personas. Sin importar raza u origen, todos estaban allí, contemplando el arte, llenando su curiosidad con cuentos e historias de la Alhambra, y pudieron contemplar que hay mil motivos para seguir aprendiendo, para seguir confiando y obtener todo aquello por lo que un día arriesgaron, una nueva vida, llena de posibilidades.

Es fascinante cómo un detalle marca la diferencia. Cómo se puede cambiar ciertos pensamientos en un solo día de convivencia y de nuevas experiencias. Ellos comprendieron todo el esfuerzo que se realizó desde dirección para conseguir las entradas, de cuantas personas intentaban acceder ese día sin poder hacerlo, de la planificación y el cariño que pusimos para poder llevar a cabo este viaje tan especial.
En el residencial no somos conscientes de las habilidades sociales que les transmitimos hasta que no llevamos a cabo actividades como éstas, donde te sientes orgullosa de ellos y de todo el equipo.

Alhambra: Gracias por adornar un día de su vida; gracias por pintar en ellos una sonrisa de esperanza.

 

Autora: Rebeca Sánchez García. RB Motril SAMU

Lucía y José Luis, familia de acogida: “Nos encanta pasar nuestro tiempo con ellos”

Desde el recurso RB Motril SAMU queremos contar la historia de dos de nuestros niños más pequeños. Gracias a todo el equipo, hemos logrado que puedan estar juntos en una familia de acogida, la familia de Lucía, José Luis y su hijo Sergio. Llenos de cariño e ilusión, comenzaron este viaje para poder ofrecer lo mejor que tenían. Y no, no era una cuestión de dar, sino de recibir, y mucho, porque, tras esta breve conversación con Lucía, nos hemos dado cuenta de lo feliz que se sienten, de cuánto les ha aportado esta experiencia, y de lo maravilloso que es dar sin esperar nada a cambio.

—¿Conocían la posibilidad de ser familia de acogida para menores en protección?
—No, no tenía ni idea de que existía esta posibilidad. Siempre hemos querido ser una familia numerosa, nos hemos criado con hermanos, y sabíamos de la importancia de una infancia con hermanos. Sin embargo, tras tener a nuestro hijo, tuvimos problemas y no pudimos tener más. Así que al ver que un familiar tenía a un niño en acogida permanente, me informé y descubrí que existía la posibilidad de disfrutar los fines de semana con alguno de estos niños en protección, así que no dudamos en dar un paso adelante.

—Ante la decisión de querer ser familia de acogida, ¿han sentido miedo?
—Nunca hemos tenido miedo, aunque a veces sí hemos sentido incertidumbre. Escuchábamos que se daban casos de robo y amenazas en los barrios cercanos a un centro de menores aquí al lado, pero quitando eso, estábamos muy ilusionados.

—¿Cómo son Sadja e Ismail? ¿Por qué dos niños en acogida?
—Nuestro primer menor en acogida estuvo muy poco tiempo con nosotros y le costaba relacionarse con la familia. Cuando conocimos a Sadja e Ismail, nos dimos cuenta de que eran dos niños muy cariñosos y bromistas. Son educados y respetan a todo el mundo. Sé que están muy unidos por su situación, y en ningún momento quisimos separarles. Así que aquí estamos, con estos dos peques formando parte de nuestra familia de una forma muy especial.

—¿Qué suelen hacer con ellos?
—Nos encanta pasar nuestro tiempo con ellos. Me acompañan cuando salgo a correr, hacen deporte conmigo, hablamos mucho en casa, paseando… Hacemos excursiones en familia, vamos al cine, hacemos deberes… Me hacen formar parte de su vida y eso es muy bonito, disfruto mucho de su compañía.

—¿Cómo han reaccionado las personas de su entorno?
—Tanto nuestra familia como nuestros amigos nos apoyaron en esta decisión. Están integrados con ellos, incluso con el resto de vecinos. No sentimos ninguna muestra de racismo por parte de nadie, al revés, todos quieren conocerlos.

—¿Qué palabra usarías para definir esta experiencia?
—Gratificante. Para mí ha sido un aprendizaje y además una ayuda para mi hijo. Está aprendiendo a compartir, a ayudar. Le encanta estar con ellos, jugar, conocer su cultura. Está siendo consciente de lo afortunado que somos al estar juntos, que hay muchas familias que por circunstancias no pueden. Todos estos valores tan humanos y tan necesarios son gracias a la experiencia de ser familia colaboradora, y con eso me quedo.

Autoras: Rebeca Sánchez y Miriam Núñez. RB Motril SAMU